El último Barcelona Meeting Point 2016, la gran fiesta de la industria inmobiliaria que reúne a expertos y empresas del sector, dejó un buen saldo de buenas noticias para España, que, según parece, poco a poco se levanta y vuelve a dar que hablar.
Según la mirada de analistas y expertos, el sector inmobiliario en España está viviendo una verdadera recuperación, un proceso lento pero certero que abarca todo el país siendo Barcelona quien lleva la delantera. Buenas noticias para un mercado alicaído que ha sufrido los embates de la crisis económica.
En el caso de la Ciudad Condal, hablamos de un momento de crecimiento que se desarrolla a un ritmo diferente al del resto de España. Barcelona lidera los índices de precio y venta de viviendas del mercado inmobiliario español, con un auge nunca visto hasta la fecha: los pisos se alquilan apenas 48 horas después de ser anunciados y la ciudad parece estar de moda, mostrando un gran dinamismo, inexistente en otras partes del país. Este movimiento se refleja en los precios de los alquileres de vivienda en Barcelona, que han subido un 18% en los últimos tiempos así como en los interesess del mercado local, que llegan hasta el 7%.
¿Fin de un período oscuro o comienzos de una nueva burbuja inmobiliaria? Los más optimistas confían en que la recuperación es real y no le temen a este crecimiento aunque otros profesionales manifiestan cierta cautela. Entre los expertos del Barcelona Meeting Point 2016, hay quienes observan que el aumento del precio del alquiler en Barcelona lleva también al incremento del precio de las viviendas, lo que elevaría el rendimiento a más de un 10% en un corto a medio plazo. Esto atraería la atención de las SOCIMIs, sociedades anónimas de inversión en el mercado inmobiliario que promueven el mercado del alquiler en España, y, los precios continuarían acelerándose.
Pero no todo es positivo, como resultado de este proceso tenemos a muchos jóvenes adultos de hasta 35 años que quedan fuera del mercado y no tienen otra opción más que alquilar. Es la franja entre 35 y 55 años de edad y los extranjeros quienes mayormente compran viviendas en Barcelona, sumándose la ciudad a una tendencia que no sólo ocurre en España sino también en otras grandes ciudades del mundo, como es el caso de Londres.