Existen diferentes razones por las cuales las personas eligen comprar una vivienda a reformar. Están los que creen que con un poco de inversión podrán transformar el inmueble en un hogar perfecto y también los que encuentran en las viviendas a remodelar una oportunidad para hacer un buen negocio, ya sea para alquilarla o bien para mejorarla y luego revender la vivienda a un precio más alto. Más allá de las intenciones, hay ciertas reglas básicas que los expertos en el negocio de la reforma de inmuebles siguen al pie de la letra para evitar hacer un mal negocio o bien para no comprar un problema a largo plazo.

Investiga el mercado

Antes de mover las fichas, los expertos recomiendan destinar algunas semanas a investigar el mercado inmobiliario para así comprender su funcionamiento. Es bueno leer la sección de compraventa de inmuebles del periódico, ir a alguna agencia y hablar con algunos agentes inmobiliarios, para entonces recibir consejos sobre los trucos de venta de propiedades residenciales en la zona de interés. El contacto con ellos y con otros participantes del mercado inmobiliario te ayudará a estar informado sobre nuevas viviendas y pisos que aparezcan, lo que se traduce en dar con las propiedades más baratas y convenientes en un mercado altamente competitivo.

 Haz números

Lo segundo y no menos importante: asegúrate de contar con el financiamiento adecuado. Si bien es común que los precios de las propiedades embargadas o de aquéllas que necesitan arreglos sean inferiores al precio de mercado, restaurar una vivienda recién comprada implica una gran inversión pues es un proceso costoso. Es crucial contar con los recursos para poder continuar el proyecto hasta el final. En caso de solicitar financiamiento al banco, infórmate antes sobre las condiciones del préstamo y asegúrate de contar con los requisitos solicitados por las entidades bancarias. Lo ideal es que, antes de elegir, realices una comparativa entre las diferentes opciones financieras para entonces elegir la que mejor se adecue a tu situación personal. Los expertos también recomiendan contar con un plan detallado de tus condiciones para mostrar a los potenciales prestamistas, pues de esta forma te presentarás como un candidato interesante. Por último, en el análisis habrá que considerar todos los gastos implicados en la recuperación del inmueble, incluyendo los costes de materiales, los seguros y el pago a los trabajadores y profesionales, como arquitectos, abogados, etc. Si realizas este análisis financiero al inicio, evitarás demoras y traspiés sobre la marcha, y no pagarás dinero no contemplado durante el proceso de reforma del inmueble.

Sé realista

Una vez realizado el análisis financiero, evita caer en la tentación de pensar en el desarrollo de una vivienda como una oportunidad que te permitirá conseguir dinero. Es un error en el que caen muchas personas, creyendo que apenas hayan colgado el último cuadro, verán recuperada y multiplicada la inversión. No siempre es el caso, las historias mágicas de personas que se convierten en millonarios en un instante son escasas y lo más probable es que la propiedad siga las leyes y los movimientos del mercado, lo que significa que la vivienda puede permanecer desocupada durante semanas, incluso meses, con los gastos que esto implica. También hay que tener en cuenta las tasas que hay que pagar y que afectan a las inversiones en propiedades residenciales. Otro punto a deliberar es si el esfuerzo vale la pena y si estás dispuesto a llevar adelante este tipo de trabajo.

Una dosis de realismo también es necesaria cuando estás evaluando el tiempo y el esfuerzo implicado en un proyecto a largo plazo. Gran parte del éxito depende del trabajo físico que puedas soportar y cuánto dependas de otros profesionales. Y si aún si delegas en un equipo de trabajadores, serás el encargado de tomar las decisiones, ir a reuniones con los profesionales y monitorear el trabajo que hace el resto. Por esta razón, los expertos aconsejan ser realistas con los tiempos y responsabilidades, pues la reforma de una vivienda requiere dedicación y un esfuerzo adicional.

No pierdas el foco

Desde un comienzo, hay que saber cuál es el objetivo de la compra de una vivienda a remodelar. El foco está en no perder de vista la razón por la cual se pensó en un proyecto de estas características. Por ejemplo, si la idea es arreglar la vivienda para alquilarla, apresúrate en reformar la propiedad mientras eliges cómo publicar la vivienda, para entonces conseguir inquilinos en los que puedas confiar para comenzar a recibir el alquiler lo antes posible. Si, en cambio, la idea es vender la propiedad una vez reformada, ten en mente un agente inmobiliario de tu agrado para comenzar con el proceso de venta lo antes posible. Aunque parece un consejo algo extraño, los expertos en casas remodeladas aseguran que es frecuente que las personas se encariñen con el proyecto, en especial cuando es el primero. Para evitar el lazo afectivo, explican que lo mejor es ejecutar el negocio cuanto antes y de la manera más eficiente.

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