Ya sea en verano o en invierno, la climatización de una casa puede representar el 40% del consumo energético mensual. Por tanto, en este sentido, reducir el consumo se ha convertido en un requisito básico para ahorrar en casa.
Una forma de reducir el consumo en este sentido es utilizar sistemas de climatización inteligentes. Con la ayuda de la conexión a Internet doméstica, este tipo de sistemas se pueden controlar de forma remota, reduciendo el consumo de energía hasta en un 40%.
- Aminorar la demanda energética
Mitigar el consumo se ha convertido en el objetivo de cualquier punto de abastecimiento español. La fuerte subida de los precios de la energía y las regulaciones sobre el consumo han llevado a este objetivo.
Para paliar esta situación podemos tomar una serie de medidas:
- Adaptar el uso de energía a las necesidades climáticas de la habitación
- Fomentar el uso de climatización natural y gratuita.
- Garantice una distribución eficaz y reduzca las pérdidas.
- Instale un sistema eficiente
- Control de clima inteligente
Los sistemas climáticos inteligentes pueden mejorar la eficiencia energética del sistema y reducir el consumo de energía en más de un 20%.
En estos sistemas inteligentes, además de ahorrar costes, las ventajas de la comodidad también son destacadas porque se pueden controlar de forma remota. Ya es posible volver a casa y mantenerlo a una temperatura seleccionada sin tener que mantener el sistema conectado todo el día.
Sin embargo, una de las mayores ventajas de estos sistemas es que pueden aprender por sí mismos y tomar sus propias acciones para maximizar la eficiencia energética. En este sentido, es sobresaliente determinar el funcionamiento, por ejemplo, la temperatura exterior o la persona que entra en la habitación.
- Termostato inteligente
La parte más importante de este tipo de sistema es el termostato inteligente. Este tipo de termostato permite el control remoto de todo el sistema.
Un termostato inteligente es un controlador que puede controlar la temperatura del sistema en cualquier lugar. Además, como decíamos, también pueden adaptar el funcionamiento del sistema a factores externos o características de la tarifa eléctrica (como la discriminación horaria).
Su característica principal es que pueden aprender de los usuarios del sistema, predecir sus necesidades y reducir aún más el consumo de energía de nuestro sistema de climatización.
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