La vida después del Brexit: los británicos compran menos propiedades en España. Los mercados más afectados son la Costa del Sol y la Costa Blanca.
Desde hace algunos años, tanto brokers como inmobiliarias han visto con buenos ojos a los británicos, quienes sumaron una activa demanda de inmuebles, siendo grandes impulsores de la recuperación del mercado inmobiliario español posterior a la crisis.
Desde 2011, los británicos han comprado más y más viviendas, llegando a casi 10 mil operaciones en 2015, lo que significó un aumento del 42% interanual y un 21% de toda la demanda internacional, superando incluso a la francesa. El caso es que el camino no siempre es color de rosas y esta tendencia en alza se vio congelada hace cinco meses con motivo del Brexit. El referéndum que terminó con la salida del Reino Unido de la UE tuvo grandes efectos en el mercado inmobiliario español pues hizo que muchos británicos dejaran de comprar inmuebles, algo que se ve reflejado en las estadísticas del último trimestre de 2016.
Para saber a qué se debe el golpe de timón, hay que analizar el mercado de divisas,ya que la demanda británica está muy ligada a la fortaleza de la libra, que ha bajado un 18%, pasando de EUR/GBP 1.40, a finales de 2015, a alrededor de EUR/GBP 1.15 en la actualidad.
Mark Stücklin, director de SHARIO.ORG, un observatorio orientado al sector de la vivienda vacacional y los resorts, afirma que “las perspectivas para el último trimestre de este año, y para el año que viene, no son buenas para la demanda Británica”. Los números reflejan la bajada: hasta ahora los compradores británicos miraban con gran atractivo la vivienda vacacional en Málaga (Costa del Sol) y Alicante (Costa Blanca). En 2015 aportaron un 28% y 26% respectivamente del mercado extranjero. También marcaban territorio en Murcia, con un 55% del mercado extranjero, en las Islas Canarias, con un 24%,y en Baleares, con un 23%. Pero encuestas realizadas con expertos del observatorio a profesionales del sector, confirman que los británicos han desacelerado la compra de inmuebles en la Costa del Sol y la Costa Blanca después del referéndum.Esto ha provocado una bajada de la actividad de cerca de un 50%. Si esta tendencia persiste en el tiempo, estos mercados sufrirán un gran impacto.