La tasación de una vivienda suele ser el punto de partida del proceso de venta. Es la herramienta que permite determinar un precio de venta que se ajuste a la realidad del mercado inmobiliario y que permita vender en las mejores condiciones, con rapidez y con el mayor beneficio posible.

Pero también para el comprador es importante la tasación de una vivienda por dos motivos. Por un lado, porque permite saber si el precio que está dispuesto a pagar por la propiedad es justo. Por otro porque, en caso de solicitar hipoteca, la tasación es requisito imprescindible, puesto que los bancos solo suelen financiar el 80% del valor del inmueble.

Qué aspectos influyen en la tasación de una vivienda

La lista de elementos que pueden determinar el valor de una vivienda es larga, aunque se pueden organizar en tres grandes apartados:

Localización

Es el elemento clave en la tasación de una vivienda. Al hablar de localización se tiene en cuenta no solo la ciudad o el barrio, también la calle e incluso su situación dentro de esta. Un ejemplo, dos viviendas similares situadas en extremos de una misma calle tendrán diferente valor si una está junto a un parque y la otra junto a una vía con mucho tráfico.

Otros aspectos relacionados con la ubicación que afectan a la tasación de una vivienda son las comunicaciones mediante transporte público, la cercanía de servicios (centros de salud, colegios, áreas comerciales, etc.) o la proximidad a zonas verdes, entre otros.

Características del edificio

En el caso de un piso, el edificio en el que se encuentra también se tiene muy en cuenta en la tasación de una vivienda. Cuestiones como la antigüedad o el estado de conservación pueden sumar o restar valor de manera decisiva. La obra nueva se valora más. Mientras, en el caso de inmuebles con muchos años, contar con una Inspección Técnica de Edificios positiva es importante porque es señal de que no será necesario acometer mejoras a corto plazo que pueden incrementar las cuotas de la comunidad.

Pero también influyen en la valoración aspectos como que el edificio cuente con zonas comunes, piscina, ascensor, garaje comunitario o trasteros. Y una cuestión que cada vez se valora más es que se trate de edificios energéticamente eficientes, es decir, con sistemas de aislamiento en cubiertas y fachadas o con placas solares para reducir la factura eléctrica de la comunidad.

Características de la vivienda

Es el tercer gran factor en la tasación de una vivienda y en él también entran en juego factores muy diferentes. El primero de ellos es la ubicación del piso en el edificio. Las viviendas en planta baja suelen valorarse menos, a excepción de aquellas que tienen patio o jardín. En cambio, las plantas altas incrementan la valoración por su mayor luminosidad, excepto en inmuebles sin ascensor.

La orientación y las vistas también son importantes. Los pisos más soleados y cálidos, los de orientación sur, suelen obtener tasaciones más elevadas, al igual que los exteriores y con vistas más agradables.

¿Qué más se tiene en cuenta a la hora de tasar una vivienda? También se considera el estado de conservación de la vivienda, la calidad de los acabados o la distribución. Así como si el inmueble tiene terraza o, en el caso, de viviendas unifamiliares, piscina o sistemas de autoconsumo con placas solares.

Qué se puede hacer para aumentar la tasación de una vivienda

A la hora de vender, es lógico buscar obtener la mayor rentabilidad posible. Hay aspectos como la ubicación de la vivienda o sus dimensiones en las que no se puede intervenir. Sin embargo, sí se pueden realizar mejoras que ayuden a aumentar la tasación de una vivienda. De hecho, se calcula que realizar obras de reforma puede incrementar el valor de un inmueble hasta en un 20%, además de que el proceso de venta será mucho más ágil.

Entre los aspectos que se pueden mejorar se incluyen el cambio de suelos y de revestimientos para actualizar baños y cocina, pintura nueva en las paredes, renovar carpinterías de interior y cambiar viejas ventanas por otras con mayores niveles de aislamiento.

En algunos casos, un cambio de distribución para aprovechar mejor los metros útiles también puede influir de manera significativa en la tasación de una vivienda. Y, si se trata de casas unifamiliares, ampliaciones como la habilitación de la buhardilla o de la bodega para disponer de alguna estancia añadida o trastero serán cambios que se pueden rentabilizar.

¿Por qué es tan importante la tasación de una vivienda?

La compraventa de una vivienda tiene un fuerte factor emocional. En el caso de los vendedores, es muy fácil caer en el error de valorar la vivienda muy por encima de su precio real en el mercado, lo que dificultará su venta. Cuando se trata de compradores, en ocasiones la primera impresión puede engañar y hacer que se pasen por alto cuestiones importantes que pueden restar valor a la propiedad.

Por ello, la tasación de una vivienda es clave para vender y para comprar a un precio justo, que responda a la realidad del mercado inmobiliario. La ventaja es que en la actualidad es sencillo obtener una valoración gratuita e inmediata gracias a herramientas online.

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