Para los compradores de vivienda, la primera impresión es, en muchas ocasiones, definitiva. Por tanto, arreglar la casa para que resulte atractiva es fundamental. De hecho, el llamado home staging se ha convertido en una estrategia más dentro del mercado inmobiliario.

Una vivienda que resulte agradable a la vista no solo atraerá a más compradores, también permitirá elevar su precio de venta. Conseguirlo no es complicado, y tampoco requiere de inversiones costosas en reformas. Hay algunos consejos para mejorar el aspecto de una casa para vender que son sencillos de poner en práctica y que funcionan.

1. La limpieza, esencial para mejorar el aspecto de una casa para vender

Es uno de los aspectos más importantes. De nada servirá ningún otro consejo si el aspecto de la casa es de abandono y suciedad. Conviene limpiar en profundidad todas las estancias y todos los elementos de la vivienda, desde suelos y paredes hasta puertas, ventanas y mobiliario, si es que lo hay.

Y, a la vez que se limpia, siempre es aconsejable revisar pequeños desperfectos para repararlos, puede ser un roce en la pared, una manivela suelta o una puerta ligeramente descolgada.

2. Orden para causar buen impresión

Una casa acogedora es una casa ordenada en la que la vista pasea sin obstáculos molestos. Para ello, hay que retirar objetos de encima de mesas o encimeras y organizar los armarios. También es buena idea retirar muebles de pequeño tamaño que sean innecesarios. Si la vivienda tiene garaje o trastero, también es importante ordenarlos.

3. Luminosidad que aporta calidez

Estancias luminosas resultan mucho más cálidas y acogedoras. Si la vivienda tiene grandes ventanas, conviene explotar todo su potencial abriendo las cortinas para dejar pasar los rayos del sol. En el caso de que la luz natural sea escasa, habrá que potenciar la artificial con lámparas que ayuden a crear ambientes más agradables.

4. Mobiliario para ambientes acogedores

Las viviendas amuebladas siempre parecen más amplias y resultan más atractivas. Pero las estancias no deben estar sobrecargadas, basta con un mobiliario y decoración básicos. Si hay algún mueble en buen estado, siempre se puede dejar.

Hay un error, sin embargo, que conviene evitar: poner todos esos muebles que se han desechado y que son de diferentes estilos. Es mejor adquirir alguna pieza de segunda mano o de bajo coste.

5. Un toque de estilo para mejorar el aspecto de una casa para vender

Aunque los muebles sean muy sencillos, siempre se puede conseguir un toque de estilo y buen gusto con pequeños detalles como alguna planta, arreglos florales discretos o cojines de colores. Ayudan a crear espacios más acogedores.

Lo que hay que evitar siempre es una decoración sobrecargada y, sobre todo, objetos decorativos muy personales como pueden ser fotos, cuadros, etc. Cuanto más neutros sean los espacios, mucho mejor. Se trata de que el comprador pueda imaginar que es su hogar.

6. Preparar la cocina

La cocina es una de las estancias que mayor atención acapara, por ello, es importante prepararla bien. Pequeños cambios como una encimera y tiradores nuevos pueden darle un aspecto más actual. También es importante asegurarse de que tiene una buena iluminación y de que el interior de los armarios está bien organizado.

7. Cuidar el aspecto de los baños

Al igual que ocurre en la cocina, centra muchas de las miradas de los posibles compradores. Eliminar el moho de juntas y rincones, poner unos grifos y accesorios nuevos y colocar toallas bonitas le darán un aspecto mucho más agradable sin necesidad de realizar obras.

8. Renovar la entrada

Es lo primero que verán los posibles compradores, de modo que debe ser objeto de un cuidado especial. Prepararla para que resulte agradable no es complicado, basta con una mano de pintura, mejorar la iluminación, una alfombra en la puerta y una mesita o un pequeño mueble auxiliar.

9. Cuidar los espacios exteriores

Hoy en día se valoran especialmente y pueden ser la clave que decante la balanza hacia un lado u otro. Si se trata de una terraza, una barandilla en buenas condiciones, alguna que otra maceta y un mobiliario sencillo son fundamentales para convencer a los posibles compradores. En el caso de una casa con patio o jardín, es importante que muestren un aspecto cuidado, limpios y con césped y plantas en buen estado.

Los profesionales del sector saben que mejorar el aspecto de una casa para vender es esencial y pueden ayudar a conseguirlo sin un gran esfuerzo y sin realizar apenas gastos. Por eso, es una estrategia más dentro de las técnicas de marketing inmobiliario.

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